Todo inicia con los pies

Todo inicia con los pies

El pie es un área de nuestro cuerpo complejo, consiste de 22 huesos, 33 articulaciones y una enorme cantidad de músculos, tendones y ligamentos. (Mojica et al., 2017) Al haber sufrido varias lesiones de rodilla el caminar, correr, y saltar se me hacía complicado. Y no tenía en cuenta que un gran factor del dolor que sufría tenía que ver con la pisada. Los pies son los primeros en tener contacto con cualquier superficie y son responsables en ayudar a absorber y producir fuerza en cada paso. Muchas lesiones llegan a ser en parte por tener pies inestables y débiles.

La estabilidad del pie depende mucho del arco plantar. El pie está compuesto del arco medial, lateral y transversal. Particularmente el arco medial le proporciona la capacidad de funcionar como una estructura flexible y rígida para una locomoción adecuada. (Jung et al., 2016). Es decir que si el arco plantar falla, la fuerza aplicada por un movimiento puede llegar a afectar las rodillas. Esto resalta la importancia de entrenar el pie. Hay diferentes ejercicios que se pueden programar para fortalecer el arco plantar. Desde aprender a tener estabilidad a un pie, tener movilidad de los dedos, trabajos donde haya que agarrar un objeto con los pies, o apretar fuerte el suelo activando los tres arcos.

Todo inicia con los piesLo que uno quiere evitar es caer en un valgo de rodilla. Está claro que el un valgo de rodilla no es significa que habrá una lesión. (Dischiavi et al., 2019). Muchas veces tiene que ver falta de control motor iniciando con problemas desde la pisada. El artículo de Dischiavi menciona que el valgo de rodilla llega ser un problema cuando el pie y musculatura de la cadera fallan, haciendo que toda la carga se transfiera a la rodilla. Esto es un tema complejo, ya que la mayoría de las lesiones meniscales y ligamentosas en la rodilla suceden con un valgo.

Esto es lo que me lleva al próximo tema y es que hay una diferencia entre entrenar un pie durante el levantamiento de pesas y otra es aplicándolo a la locomoción. Hay mucha literatura sobre la biomecánica de carrera y resaltan la eficiencia de correr con la parte frontal (forefoot running) del pie (Khorz et al., 2017). Es mucho eficiente ya que solo hay dos fases en la pisada, la fase de recepción y despegue. Caer talón punta es más lento y es conocido como ser más lesivo en momentos de mucha velocidad o fuerza aplicada en poco tiempo. En las acciones deportivas el talón tocara el suelo en una desaceleración brusca o en el momento de dar un salto vertical.

Y es aquí donde entra la importancia de los puntos de pivote, están localizados detrás del 4to y 5to metatarsiano. Se que esto arma controversia, ya que se habla mucho del dedo gordo del pie, y estoy de acuerdo que tiene su importancia. Sin embargo, el dedo gordo del pie es el último en empujar, pero cuando se trata de estabilidad, recepción y eficiencia es clave darles más importancia a los puntos de pivote.

Me gusta hacer una prueba, y es ponernos en una posición activa, en puntas (que es como corremos, jugamos en deporte, no estamos con los talones en el suelo), y simplemente quiero que estabilicen su peso, verán que todo ira hacia los puntos de pivote. No hay necesidad de provocar una fuerza excesiva, es simplemente trabajar con nuestra anatomía de manera eficiente.

Al correr debe ser igual, como resalte en la foto del valgo de rodilla, las lesiones más predominantes en el deporte siempre tienen un factor en común y es un pie totalmente colapsado internamente, haciendo que las demás estructuras se afecten. Los puntos de pivote son el punto de caída y despegue, de ahí continuamente en cada paso. Esto hará que sea más eficiente correr, saltar, tirar, cambiar de dirección y reducir el riesgo de lesión.

Personalmente, logre empezar a correr y saltar cuando logre entender y aprender este concepto. Mis rodillas logran estar en una posición segura, ya que es estable, logro fortalecer de manera eficiente las musculatura y tejido necesario para hacer todo tipo de acciones. El pie es complejo, sin embargo, no debe ser complicado entrenarlo, fortalecerlo y volverlo un arma de seguridad para el cuerpo.

Esto llevara a la teoría del “spinal engine”, que lo dejare para otro blog.

Quiero dar crédito a GOATA, quienes fueron los que me introdujeron a este concepto.

 

Dischiavi, S. L., Wright, A. A., Hegedus, E. J., & Bleakley, C. M. (2019). Rethinking dynamic knee valgus and its relation to knee injury: normal movement requiring control, not avoidance. journal of orthopaedic & sports physical therapy, 49(4), 216-218.

Knorz, S., Kluge, F., Gelse, K., Schulz-Drost, S., Hotfiel, T., Lochmann, M., … & Krinner, S. (2017). Three-dimensional biomechanical analysis of rearfoot and forefoot running. Orthopaedic journal of sports medicine, 5(7), 2325967117719065.

Mojica, M. N., & Early, J. S. (2017). Foot Biomechanics. Atlas of Orthoses and Assistive Devices E-Book, 216.

Jung, Y., Jung, M., Ryu, J., Yoon, S., Park, S. K., & Koo, S. (2016). Dynamically adjustable foot-ground contact model to estimate ground reaction force during walking and running. Gait & posture, 45, 62-68.

No Comments

Post A Comment